La bodega mendocina ganó el oro mundial en el concurso Best of Wine Tourism 2024 de las Great Wine Capitals. La ceremonia de premiación tuvo lugar en Suiza, donde compitieron los 75 ganadores regionales de las 11 capitales del vino.
La bodega orgánica y biodinámica Alpamanta se alzó con el máximo galardón durante la premiación del Concurso Best of Wine Tourism 2024 organizado por la Great Wine Capitals, durante la ceremonia que se desarrolló por estos días en el Palacio Beau-Rivage, Lausana (Suiza) durante la asamblea anual de la Red.
Este prestigioso certamen destaca los logros en Enoturismo de las principales regiones del mundo, a fin de visibilizar en distintas categorías las más inspiradoras e innovadoras experiencias para los visitantes en cuanto a “Alojamiento”; “Restaurante”; “Arquitectura, parques y jardines”; “Prácticas sustentables”; “Arte y cultura”; “Experiencias innovadoras” y “Servicios relacionados al turismo del vino”.
Este año, el concurso recibió 551 solicitudes de 11 capitales de todo el mundo y fueron 75 los ganadores regionales en sus respectivos destinos que se distinguieron por su extraordinario aporte al turismo del vino.
Habiéndose alzado este año con el premio oro a nivel local en dos categorías “Prácticas sustentables” y “Arquitectura, parques y jardines”, el nuevo galardón a nivel mundial consagra a Alpamanta como líder en este tipo de acciones y visibiliza aún más a Argentina y Latinoamérica como destino en el que alcanzar máximos niveles de calidad en los procesos es posible.
En esta edición el premio Oro Internacional para Mendoza fue entregado por el Embajador argentino en Suiza, Gustavo Martínez Pandiani, a Bodega Alpamanta en manos de su representante Jean Hauss.
“Es un orgullo inmenso recibir este oro internacional. Desde nuestro inicio hace 20 años y con la hoja de ruta que nos dieron los inversionistas de armar un proyecto con foco en el aspecto sustentable, nuestro equipo abrazó ese desafío con gran entusiasmo y profesionalismo. Este reconocimiento nos hace referente de Enoturismo sustentable en Latinoamérica, vidriera para América y el mundo entero”, manifestó Christophe Chartier, director de Alpamanta.
La bodega certificada orgánica y biodinámica nacida en 2005 aplica esta filosofía en todos sus procesos de elaboración, producción y cuidado de las 35 hectáreas de viñedos que posee. Preservando el equilibrio natural del ecosistema en el viñedo, es un establecimiento boutique que implementa prácticas biodinámicas que permiten obtener plantas saludables, buenos rendimientos y complejidad aromática sin contaminar los suelos.
“Este premio refuerza más que nunca nuestro compromiso con la educación y comunicación hacia nuestros vecinos y clientes nacionales e internacionales acerca de que podemos consumir un producto de alta calidad cuidando la economía, el medio ambiente y la comunidad que nos rodea. Es un logro que nos motiva y alienta a continuar trabajando a futuro, siendo referentes en América Latina, tal como lo hacen hoy en América del Norte, Europa y Oceanía, empresas que comparten la filosofía de sostener un modelo de vitivinicultura 100% sustentable”, señaló Chartier.
Por su parte, Clarisa Murekian, Hospitality Manager de la empresa, afirmó que las prácticas sustentables aplicadas en los procesos están armoniosamente integradas en la experiencia de turismo.
“Buscamos ser líderes y referentes en sustentabilidad y preservación del medio ambiente, queremos inspirar a los visitantes y a otros emprendimientos a incorporar este tipo de prácticas donde la circularidad está siempre presente. Conscientes y respetuosos, queremos dejar el lugar mejor de como lo encontramos”, manifestó Murekian.
Acerca de Alpamanta
En idioma nativo local, Alpamanta significa “amor por la tierra” sentimiento que se percibe en cada uno de sus espacios. La empresa es propiedad de Andrej Razumovsky de Austria, André Hoffman de Suiza y Jérémie Delecourt, de Francia.
Alpamanta está ubicada en Agrelo, Luján de Cuyo, y busca poner en valor la importancia de nuevas formas de elaborar vino que sean ambientalmente conscientes para cuidar los recursos naturales y preservar el planeta para futuras generaciones. En las visitas que recibe comparte conceptos de la agricultura biodinámica y de los procesos orgánicos, buscando que convivan de manera armónica los reinos mineral, animal, vegetal y humano. Por otro, limita el uso del agua a su mínima expresión posible.