Floraciones que pincelan con color el jardín. Conocé todo acerca de las plantas perennes y las anuales.
Imaginá tu jardín como un lienzo en constante evolución. Cada pincelada, una planta que aporta color, textura y vida. Pero ¿qué tipo de pintura elegirías? ¿Los colores elocuentes y efímeros de las anuales, o la paleta más suave y duradera de las perennes?
A menudo me consultan sobre qué tipo de plantas empleo en los diseños de jardines, porque no desean estar comprando nuevas todas las estaciones o al menos dos veces al año. Yo uso la mayor cantidad de perennes, pero siempre explico algunos detalles para que el cliente elija. Vamos con ello.
Las Anuales
Las anuales, como las petunias que visten nuestras calles con un manto de colores, son como fuegos artificiales en el jardín. Florecen rápido y con intensidad, creando un espectáculo visual que cambia con cada estación. Son perfectas para quienes desean un jardín que siempre luzca nuevo y lleno de sorpresas. La zinnia, con sus alegres colores, y los pensamientos, con su inmensa variedad de tonalidades, son otras opciones que no pueden faltar en un jardín mendocino.
Pero esta belleza tiene un precio: requieren más atención. Debés sembrarlas cada año o comprar los plantines en el vivero; regarlas con frecuencia y retirar las flores marchitas para estimular la floración continua.
Las Perennes
Las perennes, como la lavanda que perfuma nuestros jardines con su aroma característico, son como los árboles centenarios. Brindan una estructura sólida y belleza atemporal. Una vez establecidas, requieren menos cuidados y nos recompensan con una floración anual que se renueva cada primavera o a lo largo de todo el año de acuerdo con la especie.
Las salvias son un gran grupo de plantas con hojas aromáticas y flores de diferentes colores, que se despliegan a lo largo de distintas estaciones según la especie de la que se trate.
La rudbeckia, con sus alegres pétalos amarillos, los agapantos y los laureles en flor, son otras opciones que aportarán un toque de elegancia a tu jardín.
¿Cuál elegir?
La elección entre anuales y perennes depende de tus gustos y del tiempo que puedas dedicar a tu jardín. Si buscás un jardín que requiera poco mantenimiento y te brinde satisfacción durante todo el año, las perennes son tu mejor opción. Si preferís experimentar con diferentes colores y texturas cada temporada, las anuales te ofrecerán un sinfín de posibilidades.
La elección entre anuales y perennes depende de tus gustos y del tiempo que puedas dedicar a tu jardín.
¡Lo mejor de ambos mundos!
¿Por qué no combinar ambas? Creá un jardín donde las perennes sean la base y las anuales aporten los toques de color estacionales. Por ejemplo, podés plantar una bordura de lavandas y salvias, y cada año cambiar las flores de temporada en el centro.
En Mendoza, la naturaleza nos brinda una paleta de colores y formas infinitas. Aprovechá esta diversidad y creá un jardín que sea un reflejo de tu personalidad y que te brinde alegría durante todo el año. ¿Te animás?