En Avenida Boulogne Sur Mer, emerge impactante la Torre Thays. Edificio de apartamentos con un concepto de interiorismo basado en la comodidad y la alta calidad de vida. Belleza y prestancia al detalle.
Si la vista de un lugar “es todo lo que está bien” para muchos, poder tener “la vista” y además “el lugar”, definitivamente es el mix perfecto para todos. Un concepto que proyecta a primera vista la exquisita Torre Thays, ubicada en Avenida Boulogne Sur Mer. Un edificio de apartamentos de cara al espectacular Parque General San Martín cuyo interiorismo a cargo de Macarena Mosso impacta por su equilibrio entre comodidad, calidez y purismo entre concepto y forma.
Y es desde allí, abrazada por el movimiento más pausado de la ciudad, en donde la Torre Thays invita a descubrirla en cada detalle, no sólo de su arquitectura sino de un interiorismo pensado, acodado en el buen gusto, los tonos cálidos y las texturas diversas y amigables.
Ya desde el lobby, y como un preludio perfecto se sigue el concepto arquitectónico de materiales nobles y líneas simples, con muros revestidos y pisos en piezas XXL de coverlam negro, para generar la idea de telón de fondo al mobiliario.
“Para la espera, diseñamos un sofá 360° tapizado en color contrastante y colocamos diferentes lámparas colgantes para acentuar el espacio central. El mueble de recepción en madera de roble de barrica recuperada, genera un contrapunto y aporta la identidad de Mendoza”, describió la interiorista Macarena Mosso a cargo del proyecto.
La sala de reunión
Para la misma se eligió una paleta de color y materiales inspirados en el Parque General San Martin: verde seco, ramas, madera naturales, texturas, etc., y se materializó en el diseño del mobiliario.
Con la mirada puesta en el confort, se generaron dos espacios de reunión: uno informal para encuentros más breves, y otro formal para la presencia de mayor cantidad de personas, cada uno con su identidad e impronta única.
“Por su lado, destacamos el muro posterior con un gran espacio de guardado, y la escultura de Cepas que diseñamos en conjunto con Pablo Comadran, en honor a nuestros viñedos”, contó la profesional.
El SUM
La premisa para este espacio fue generar un lugar versátil y práctico. Por ello para el área de comedor se utilizó mobiliario liviano, aluminio y plástico, en colores neutros y elegantes.
“La premisa para el SUM fue generar un lugar versátil y práctico”.
Además se propusieron dos áreas de estar espejadas y se diseñó el sofá dúo, con vista a la TV, pero también al exterior. Se acompañaron con silloncitos en madera y tapizados en tusor que aportaron calidez al espacio, junto con plantas en grandes macetas y otras tantas colgantes.
El piloto
Sin lugar a dudas el piloto es la puesta en marcha y en concreto del sueño ideado, en este caso por los profesionales del interiorismo, que pensaron en un cliente “imaginario”, que se animara a algo diferente.
“Por ello decidimos trabajar al 100% y de forma envolvente los muros. El estar por su lado, fue revestido con porcelanato, madera y pintura gris grafito. Respecto a los dormitorios secundarios, empapelamos hasta el cielorraso, mientras que en el dormitorio principal el muro cabecero fue revestido en madera con diseño geométrico”, detalló la interiorista.
“En todos los espacios nos animamos al color, ya sea en muros o en mobiliarios. La idea fue generar espacios frescos y dinámicos”.
Por su lado, en el estar-comedor se enfatizó la vista hacia el Parque General San Martín, diseñando muebles como el sofá quebrado (que se abre en la esquina del balcón) que junto a las poltronas en pana y mesas metálicas, le dan un aire de relax y pausa al ritmo de la ciudad. También se diseñaron silloncitos para el balcón que fueron elaborados y ejecutados junto a Pilar Jardel Tejidos.
“En todos los espacios nos animamos al color, ya sea en muros o en mobiliarios. La idea fue generar espacios frescos y dinámicos”, concluyó la profesional.
Proveedor destacado:
Carpintería y vidrios. Mendoglass. www.mendoglass.com