Desde el secado al aire hasta el prensado entre las páginas de tu libro favorito, hay muchas maneras de secar las flores de tu jardín y preservar su belleza. Hay métodos para probar en casa, sin importar el uso de tus flores secas.

Es sencillo secar tus flores cultivadas en casa. Cuando las cortás frescas es posible que duren una o dos semanas en un jarrón. Ahora, cuando se secan y conservan, pueden durar meses o incluso años, mucho más allá de la temporada.

Dependiendo cuáles elijas y del uso que quieras darles, hay varios métodos de secado que podés probar. Una vez que hayas terminado de secarlas, podés sellarlas con un aerosol o inclusive laca para el cabello. De esta manera vas a extender su vida útil y exhibirlas y usarlas tal como están.

Hay procesos diferentes para secar las flores

Secado al aire: Es el método más tradicional para secar flores. El proceso consiste en atar una serie de pequeños ramos y colgarlos boca abajo. Este método tarda de dos a cuatro semanas en completarse porque se necesita mucho tiempo para que las flores se sequen por completo sin ningún tipo de acelerante. El secado al aire es ideal para hacer ramos secos para centros de mesa o acentos decorativos en tu hogar.

Calentar en el microondas: En un microondas con un recipiente de desecante, como gel de sílice o arena para gatos, colocá tus flores para secarlas sin marchitarlas. El método del microondas te permite ver los resultados en días en lugar de semanas y es mejor para cabezas de flores o plantas más pequeñas en lugar de ramos completos.

Horneado: Implica ponerlas en el horno a baja temperatura y hornearlas durante un par de horas. Este es un método rápido para secar flores, pero puedes perder muchos pétalos en el proceso. Además, este método no es el mejor para preservar el color de tus flores.

Prensado: El prensado de flores implica el uso de objetos pesados para exprimir la humedad de una flor. El prensado es una forma eficaz de secar flores para manualidades, obras de arte o artículos de papelería.

Las pequeñas y resistentes como las hortensias, el amaranto, la lavanda, la celosía y la flor de fresa se adaptan bien al secado al aire porque tienen un menor contenido de agua que otras y resisten bien durante el largo proceso de secado.

Las pequeñas o planas con una sola capa de pétalos son las mejores para presionar. Algunas de las que se pueden prensar incluyen margaritas, pensamientos, ramitas de lavanda y violas.

Las grandes o más delicadas deben mantenerse en un recipiente sellado con una sustancia que elimine la humedad. Las lilas, los pensamientos, las dalias, las peonías y las margaritas se mantienen bien cuando se secan en un desecante.