El postre es casi, el mejor momento de una comida, la variedad de propuestas es enorme y, en esta oportunidad, compartiremos la receta de un clásico que siempre gusta a todos: el mousse.
En varios sabores y en exquisitas presentaciones, los mousses de frutas siempre son elegidos.
La terminología mousse proviene del francés “moss”, que significa musgo o espuma. Esta preparación puede ser dulce o salada.
El final de una gran comida resulta el momento ideal para compartirlo y sorprender a nuestros invitados.
La terminología mousse proviene del francés “moss”, que significa musgo o espuma.
Ingredientes
- 3 claras.
- 150 g de azúcar.
- 250 g de frutillas.
- 7 g de gelatina.
- 200 cc de crema de leche.
Preparación
- Hacer un merengue italiano con las claras y el azúcar, y una vez conseguidos los picos firmes retirar y reservar.
- Lavar las frutillas, retirarles su cabito, cortarlas lo más pequeñas posible y hacer con ellas un puré.
- Hidratar la gelatina en agua, incorporarla a las frutillas y agregar con movimientos envolventes el merengue y la crema batida a medio punto.
- Reservar en freezer como mínimo por dos horas y retirar cinco minutos antes de servir.
