More

    ¿Te gustan las plantas acuáticas? ¡No podés perderte esta nota sobre los wabi-kusa! Qué son y cómo tener el tuyo.

    Los wabi-kusa son pequeños arreglos con plantas acuáticas cultivadas en una bola de sustrato o en un pequeño recipiente en miniatura (caja de vidrio, esfera o un florero que adaptaremos a tal fin).

    El término “wabi-kusa” es una combinación de dos palabras japonesas: “wabi”, que se refiere a la simplicidad y la belleza minimalista, y “kusa”, que significa “hierba”.

    Se cultivan como una forma de arte y se valoran por su belleza natural y su sencillez. A menudo se utilizan como decoración en el hogar o como elementos decorativos en pequeñas terrazas o balcones. Tienen que estar en un lugar bien iluminado o con luz artificial para que las plantas crezcan y se desarrollen en óptimas condiciones.

    Los wabi-kusa se mantienen en un pequeño recipiente con agua y se alimentan con fertilizantes especiales para plantas acuáticas, aunque dependiendo de la selección vegetal y del sustrato, tal vez no sea necesario realizar dicha fertilización.

    Se pueden cultivar una variedad de plantas acuáticas y terrestres incluyendo musgos y helechos. En muchos casos son plantas acuáticas cultivadas de forma emergida (sobre el nivel del agua) por lo que requieren de una humedad atmosférica elevada.

    Elementos necesarios para construir un Wabi-Kusa

    • Un recipiente de agua: Puede ser una pecera, los recipientes que te mencioné antes, pero podrías adaptar también un tazón de cerámica, vaso de vidrio, etc.
    • Un sustrato: Puedes usar una mezcla especial para Wabi-Kusa, sustrato para acuarios o una mezcla de arcilla expandida y turba.
    • Plantas: Puedes usar plantas acuáticas y plantas que crecen naturalmente sobre sustratos húmedos como los musgos y helechos. En mi caso también uso el musgo de java (Vesicularia dubyana) que funciona excelente formando una alfombra verde como si se tratara de césped.
    • Accesorios decorativos (opcional): Puedes añadir piedras, caracolas, ramas secas que dejó el río o encontraste en la orilla de un lago (siempre recuperadas del agua dulce), para darle tu toque personal.

    • Pasos a seguir

    • Elige tu recipiente y llénalo con agua hasta la mitad.
    • Coloca el sustrato asegurándote de que quede a un nivel ligeramente inferior al borde del recipiente.
    • Añade los accesorios decorativos, si lo deseas.
    • Coloca las plantas en el sustrato, asegurándote de que queden firmes. Puedes usar un palillo de dientes o una aguja de tejer para sujetarlas en su lugar.
    • Ajusta la cantidad de agua según sea necesario para mantener el sustrato húmedo y las plantas vivas. Cuando lo tengas terminado deberás controlar el nivel de agua para ir reponiendo lo que se evapore y consuman las plantas. Una vez al mes deberás cambiar el agua para evitar que se estanque. Puedes hacerlo con más frecuencia, solo debes asegurarte de que no contenga cloro habiéndola dejado en un recipiente para que este se evapore o usando algún producto de acuarismo para tal fin. No te recomiendo el agua de lluvia porque si vives en una ciudad lo más probable es que contenga los contaminantes de la atmósfera y hasta el pH se vea modificado.

    Las más leidas

    Descubrí qué son los maravillosos wabi-kusa

    Compartir esta nota:

    Últimas noticias

    Premio Pritzker a la Arquitectura 2023

    Te contamos quién es y cuál es la trayectoria de David Chipperfield, el ganador de este año del...

    Los cinco sombreros que son tendencia este otoño

    De aires deportivos, o incluso alpinos, los gorros y gorras son uno de los accesorios estrella de la...

    El color y tus chakras. ¿Cómo vibramos con el color?

    ¡Tanto podemos transmitir con el color!, ¡tanto puede transformarnos un lugar! que podríamos nombrarlo cómo uno de los...

    Plantas, tipos de estrés y cómo prevenirlos

    El mes pasado comenzamos a ver cómo las plantas pueden verse afectadas por las condiciones ambientales y la...