Si bien la caminata suele pasar desapercibida como una forma de ejercicio, realizar la actividad trae una gran cantidad de beneficios para nuestra salud. ¡Descubrilos!
Cuando destinamos tiempo del día para caminar de manera consciente, quemamos calorías, mejoramos la salud del corazón y aprovechamos los beneficios de estar al aire libre. Esta actividad nos llena de endorfinas y promueve el buen humor.
A medida que subas el ritmo, el ejercicio se volverá aeróbico.
Te contamos 5 beneficios que podés obtener de la caminata:
Realizás una actividad de cardio
Las caminatas son la mejor opción para hacer ejercicio de bajo impacto y gratuito, que ayuda a mejorar la salud cardiovascular.
En el caso de querer bajar de peso, es una buena idea comenzar con caminatas lentas. Cuando tu cuerpo ya se haya acostumbrado a caminar largas distancias, será momento de ir aumentando la velocidad de tu caminata (la velocidad ideal es la de recorrer un kilómetro en 10 ó 12 minutos).
Ver un paisaje bonito, escuchar el canto de los pájaros y respirar aire fresco, pueden mejorar la atención y la memoria.
A medida que subas el ritmo, el ejercicio se volverá aeróbico. También podés alternar periodos de caminata rápida con caminata más lenta. A esto se le llama “intervalos”. Esta forma de entrenamiento es ideal para el fitness cardiovascular y para quemar más calorías que en una caminata regular.
Fortalecés los músculos de las piernas (entre otros)
Caminar hace trabajar de manera efectiva a distintos grupos musculares del tren inferior: los cuádriceps, los glúteos, las pantorrillas y los tobillos.
Para incrementar el efecto, caminar cuesta arriba o elevar la inclinación durante el entrenamiento en la cinta, especialmente a una inclinación de 3 grados o superior, aumenta la activación de estos grupos musculares, especialmente de los glúteos.
Mejorás tu sistema inmune
¿Sabías que caminar como forma de ejercicio puede ayudar a combatir un resfriado común? Un estudio concluyó que las personas que caminan 20 minutos al día, al menos cinco días a la semana, están un 43% menos días enfermas que las que solo hacen ejercicio una vez por semana o que no hacen nada.
Una caminata regular permite a las personas mayores desarrollar más células T (o linfocitos T) que las personas de la misma edad que están inmersos en una vida sedentaria.
Mejorás tu concentración y memoria
Caminar 30 minutos al aire libre tiene una mayor influencia sobre las funciones cognitivas que caminar en un ambiente urbano.
Ver un paisaje bonito, escuchar el canto de los pájaros y respirar aire fresco, pueden mejorar la atención y la memoria.
Se recomienda especialmente a las personas mayores.
La teoría de la restauración de la atención afirma que el acto de contemplar sin esfuerzo la belleza que nos rodea, junto con los estímulos estéticos que esta contiene, nos puede ayudar a restablecer nuestra capacidad de atención.
Mejorás tu coordinación y equilibrio
Como ya dijimos, la caminata fortalece tu tren inferior. Es por esto que, con mayor fuerza en tus piernas, incrementás notablemente tu equilibrio y coordinación.
Se recomienda especialmente a las personas mayores, ya que es importante para prevenir caídas.
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