Si más de una vez soñaste con hacerte un arito, pero nunca te animaste por miedo al dolor o arrepentimiento, ¡te traemos una solución!
Los ear cuffs, también conocidos como “piercings no invasivos”, son aros que pueden colocarse sin la necesidad de atravesar la piel.
La clave de estos modelos, que varían desde argollas hasta pequeñas perlas, está en cómo se cierran y se sostienen en su lugar.
Para que estos luzcan como piercing reales, deben sujetarse con la presión que ejerce el mismo pendiente, ya sea con un imán o con el diámetro pequeño de la misma argolla.
¿Qué aros pueden reemplazar los ear cuffs o falsos piercings?
Uno de los piercings más elegidos a la hora de reemplazarlos con falsas argollas, son los famosos septum, conocido popularmente como “aro de toro”. Este se coloca en el cartílago de la nariz entre los dos orificios. Se dice que es de los más dolorosos a la hora de perforar, debido al grosor del cartílago en esa zona.
Por eso, un falso piercing es la opción ideal para lucir un septum sin dolor ni arrepentimiento.
Otra gran opción a la hora de elegir un falso piercing, es el labret, conocido como el piercing del labio. Hoy en día este aro está a la moda y se volvió una tendencia luego de que varias famosas lo incorporaron a sus looks, como por ejemplo Tini Stoessel.
La argolla falsa puede colocarse en cualquier lugar del labio inferior, y luego ser removida para comer o dormir.
En la siguiente imagen, podemos ver a la artista pop Nathy Peluso, luciendo falsos piercings en su boca y nariz.
También, estos aros sin perforación pueden lucirse de una forma más clásica en las orejas, a lo largo de todo el cartílago. Por lo que si te gustan los brillos metálicos enmarcando tu rostro, podés acceder a todos los que quieras sin necesidad de pasar por el dolor de la perforación en cada uno.
Ya no necesitás perforarte la piel para lucir tus piercings. ¡elegí esta opción no invasiva y sumate a la tendencia del verano!