Tener un patio japonés en nuestra casa es sinónimo de relajación y reflexión, es como tener nuestro propio espacio para el retiro espiritual.

Recreá un espacio de juventud a través de la serenidad y la casi total ausencia de movimiento de elementos que proporciona un patio japonés. Llená tu espacio del encanto propio de la cultura ancestral nipona.

PATIO JAPONÉS: SIGNIFICADO

Un patio japonés está ligado a la cultura Zen, que busca el equilibrio en todas sus formas. ¿Te suenan los términos Yin Yang? Es el concepto que expresa dualidad: dos fuerzas aparentemente opuestas, pero complementarias al mismo tiempo: luz-oscuridad, vida-muerte, mente-cuerpo. El Yin es el principio femenino, que representa la tierra, la oscuridad. Por su parte, el yang es el principio masculino, que representa el cielo y la luz.

Según esta idea, nada existe en estado puro y todo está en continua transformación. Dicha teoría tiene los siguientes principios básicos:

– El yin y el yang se oponen entre sí y pueden transformarse a su vez el uno en el otro.

– El yin y el yang son independientes. No obstante, en el yin hay yang y en el yang hay yin.

– El yin y el yang se dividen a su vez en yin y yang.

– El yin y el yang forman un equilibrio de tal manera que cuando uno crece, el otro disminuye.

Todo en la filosofía Zen está interrelacionado. Añadí un poco de Zen a tu patio y creá un maravilloso espacio de armonía y contemplación.

ELEMENTOS DEL PATIO JAPONÉS

El estilo japonés en la decoración de patios es una tendencia que se está imponiendo debido a su simpleza y su unión con la naturaleza. Si querés adaptar tu patio al estilo nipón, anotá nuestros consejos para recrear el espacio a la perfección.

Lo primero que debés hacer es visualizar tu patio e incorporar elementos básicos naturales, como agua, roca y vegetación. Podés colocar una pequeña fuente o un estanque que aporte calma y que simule la naturaleza mediante formas geométricas y materiales naturales como piedras, grava o arena. Complementá tu estanque o fuente con espacios rocosos a través del uso de piedras decorativas de diversos colores y tamaños y arena rastrillada. Según la tradición nipona, las piedras deben colocarse en número impar. Podemos utilizarlas para crear peldaños, para simular una pequeña colina o montaña o para marcar el sendero que querermos diseñar en nuestro patio.

ÁRBOLES Y PLANTAS

Uno de los elementos más importantes en la decoración de nuestro patio japonés serán las plantas. Recordá que éstas deberán seguir la línea espiritual característica de la filosofía Zen. Algunas de las plantas que no deben faltar en tu patio son: el cerezo, que presenta un espectacular florecimiento en primavera; el arce, que es sinónimo de delicadeza y presenta una amplia gama de colores en sus hojas; y el bambú, que aporta un relajante sonido gracias al movimiento de sus hojas. Los bonsáis también son una maravillosa opción, que aportarán belleza y sensación de calma.
Además, para hacer del patio japonés un espacio más acogedor, podés colocar un banco o sillas que combinen con los colores de todo el patio. Y tampoco te olvidés de dar iluminación al patio con unos bonitos faroles.

Lo único que debés recordar al decorar o diseñar un patio japonés es que todo debe estar ordenado y debe dar una sensación de calma y sencillez. No tratés de decorar hasta el último espacio del patio, los patios japoneses se caracterizan por contar con espacios vacíos, porque denotan serenidad y equilibrio.